Con motivo de los 100 años de presencia salesiana en Las Antillas, don Ángel Fernández Artime ha elegido, en este 2017, celebrar la festividad de san Juan Bosco en la región caribeña.
El 31 de enero, en la República Dominicana, se estableció por Ley, en honor a Don Bosco, el Día Nacional de la Juventud. El Rector Mayor llegó a la tierra “quisqueyana”, nombre familiar aplicado a la República Dominicana, cuyo vocablo aborigen significa “Madre de las tierras”, recibido en el Aeropuerto Internacional de las Américas por los jóvenes de la Plaza Educativa Don Bosco.
Salió del aeropuerto, acompañado por, don Francisco Batista, Inspector de Las Antillas y de Mons. Louis Kébreau, Arzobispo de Cabo Haitiano; en medio de cantos, bailes, aplausos y muchos gritos de alegría se le dio una cálida bienvenida al X Sucesor de Don Bosco.
El Rector Mayor, como buen Padre, se prestó para los selfies, bromeó con todos los que se acercaban y saludaba a los jóvenes con un afecto único, con el mismo corazón de Don Bosco. Los jóvenes le sorprendieron con un regalo hermoso: un sombrero dominicano, el cual lució como buen hijo de la humanidad.
Después el Rector Mayor se dirigió a la casa Inspectorial. Allí fue recibido con cantos festivos por los jóvenes en formación: Pre novicios, Pos novicios, Tirocinantes y 3 jóvenes que están realizando la experiencia del Aspirantado en comunidad. Saludó a los salesianos presentes, de manera especial a don José Pastor Ramírez, ex Delegado Mundial de los Exalumnos.
Ya por la tarde, en la celebración de la festividad de Don Bosco, don Ángel tuvo el gran encuentro con los jóvenes, más de 700, que se dieron cita en el Instituto Técnico Salesiano de la capital. “Hay un valor grande que me gusta de vosotros, queridos jóvenes: la sencillez. Y de mis queridos hermanos salesianos y hermanas salesianas: su entrega amorosa. Sencillez, entrega y amor, son valores eminentemente salesianazos”. Estuvo acompañado por el inspector y su Consejo. Invitó, nuevamente a los jóvenes, a “ir contracorriente” y sin miedos para alcanzar metas altas. “Hemos celebrado a Don Bosco y todo el movimiento que realizó en favor de los jóvenes pobres. A vosotros os corresponde continuar esta aventura”.
Posteriormente, comenzó la celebración eucarística presidida por don Ángel y con la presencia de Mons. Louis Kébrau, Arzobispo emérito de Cabo Haitiano. Con la fuerza de un padre les dijo: “Mis queridos jóvenes, el mundo de hoy necesita de vosotros. El mundo necesita jóvenes llenos de esperanza y de fortaleza y que no tengan miedo a vivir y a soñar, pero principalmente a buscar una profunda felicidad en Dios”.
Concluida la celebración eucarística tuvo el encuentro con las Hijas de María Auxiliadora en la Casa Inspectorial. Fue recibido por los niños del Hogar Escuela Santo Domingo Savio. En la cena familiar asistieron exalumnos y bienhechores, don Jean Paul Mesidor, Superior de la Visitaduría de Haití, el Ministro de Educación y exalumno salesiano, don Andrés Navarro.
Durante la cena recibió como regalo a la “Virgen de Nuestra Señora de la Altagracia”, patrona del pueblo dominicano y, una pintura que representa la vida y la cultura del pueblo haitiano. El encuentro de vida y fraternidad concluyó con unas ‘buenas noches’ del Rector Mayor. “Todavía hoy se dan los milagros educativos –explicaba el Rector Mayor- cuando llegamos al corazón de un niño o de un joven que se siente querido. Vino un joven y me dijo: ‘Padre no vengo a pedirte una foto, ¿puedo darte un abrazo?’. Ese abrazo significa que hay algo hermoso que se ha hecho por este joven. Hoy vengo a vosotros para agradeceros por la entrega y fidelidad y por el cariño a la misión salesiana”.
El 1 de febrero el Rector Mayor continuó su visita a República Dominicana visitando La Vega y Moca. En el primer lugar, visitó el Instituto Agrícola y Técnico Salesiano (IATESA), y, en el segundo, presidió una Eucaristía con la Familia Salesiana.
El jueves, 2 de febrero, después de la visita a la obra de Jarabacoa, el Rector llegó a Puerto Rico, donde permaneció alrededor de 24 horas, para encontrarse con los Salesianos, la Familia Salesiana y los jóvenes del país.
El viernes 3, por la tarde, don Ángel se encontró en Cuba. Al día siguiente, tuvo programadas distintas reuniones en La Habana con los Salesianos, la misa con la Familia Salesiana y un momento artístico-cultural.
El domingo, 5 de febrero, en presencia de las autoridades eclesiásticas locales, celebró la Santa Misa de clausura de la Visita de Animación por el centenario de la presencia salesiana.
