”A nosotros nos toca, como María Mazzarello y Don Bosco, dar la vida por los niños y jóvenes”

20 enero 2017

¿Cómo sentiste la llamada a la vida Religiosa? ¿Por qué Salesiana?
Cuando me matricularon en  el Colegio de las Hijas de María Auxiliadora en Chantrea Pamplona, sentí algo muy especial.
 
Las hermanas nos trataban con familiaridad, cariño y respeto. Se preocupaban por cada una de nosotras, por nuestro rendimiento escolar y por nuestra formación integral y en  valores.

Sentí que el Señor me llamaba a ser toda de Él en este camino, con  los modelos de aquellas hermanas que eran  fieles hijas de  María Auxiliadora de Madre  Mazzarello  y  de D. Bosco. Y  que se les veía que su confianza estaba en Dios.
 
¿Qué balance haces de  estos 50 años  de tu  profesión religiosa, como salesiana?
Muy positivo. Pues aunque no es un camino de rosas como decía D. Bosco  (las rosas tienen espinas), constato que Él siempre ha estado a mi lado. Que los niños y jóvenes han ocupado en mi corazón un sitio muy  especial y estando con ellos me he sentido más cerca de Dios.

Dios presente en cada joven y niño, en cada hermana y hermano.
La relación con Jesús,  es un camino que me ha cambiado la vida  a medida que he ido madurando y haciendo un proceso.
 
¿Cuáles han sido tus referentes vocacionales?
La vida  pública de Jesús, su manera de tratar a las personas, su compasión por la gente más necesitada. Su relación con el Padre, su oración.

La vida oculta y sencilla de María. Su apertura a Dios, la aceptación a su voluntad…
Al estudiar la vida de María  Mazzarello  y  de  D. Bosco  vi que eran un ejemplo a seguir, que respondían a lo que yo quería hacer con mi vida.
 
 De Don Bosco se decía que era “Signo y portador del amor de Dios a los jóvenes” ¿Cómo se puede hacer hoy día vida esta frase?
Hay muchas personas en nuestra familia Salesiana,  que hoy  día están apostando por los niños y jóvenes. Les entregan su tiempo, su escucha, la enseñanza, el amor.”  Que se sientan amados.  Que  hablan a los jóvenes de Jesús  y de María Auxiliadora con gran pasión. Es tiempo de sembrar sin esperar frutos.  Y como el labrador esperan con paciencia  a que el fruto crezca.

A nosotros nos toca como María Mazzarello y Don Bosco dar la vida por los niños y jóvenes.
Ser arriesgados en este tiempo de increencia. No tener miedo de hablar de Dios, de lo que somos y vivimos. De  dar razón de nuestra fe.
 
¿Cómo ves a los jóvenes respecto a la iglesia? ¿Qué estrategia crees que se debería seguir para que se acercaran a ella?

Veo que los jóvenes están alejados de la Iglesia, creo que  los adultos tenemos  mucha responsabilidad. En tiempo de D. Bosco también sus muchachos eran poco creyentes.

¿Qué hizo D. Bosco? Acercarse a ellos, dialogar con ellos. Que ellos se sientan amados, motivados, valorados…  Y se quedaron con D. Bosco. Cada persona tiene que hacer su proceso de fe y para ello necesita quien les acompañe, le ayude y un grupo para vivir la fe.

¿Qué retos piensas que debe asumir la Familia Salesiana en el Siglo XXI?
Cuidar la vida de oración. Abandono en Dios y María Auxiliadora.  Cuidar la vida de familia. Dar la vida por los jóvenes.  Predicar con el ejemplo
 

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