Con motivo de la festividad de San Juan Bosco, que se celebra el 31 de enero, el Rector Mayor de los Salesianos, Don Ángel Fernández Artime, anima a los jóvenes a que se dejen "robar" el corazón por el Señor para poder hacer realidad el sueño de Dios para cada uno de ellos, que es siempre "garantía de felicidad".
El Rector Mayor de los Salesianos, Don Ángel Fernández Artime, ha enviado el tradicional Mensaje a los jóvenes de todas las Presencias Salesianas del Mundo en la Fiesta de Don Bosco, en el que los invita a dejarse conquistar por Jesús: "No tengáis miedo de que vaya calando tan profundamente en vuestro corazón que ya no podáis vivir sin Él".
El décimo sucesor de Don Bosco concreta su mensaje a los jóvenes en ocho consejos: escuchar su voz interior; reconocer la presencia de Dios; dejarse ayudar en esta búsqueda; vivir experiencias que los lleven al encuentro personal con el Señor; fortalecer la amistad con Jesús; pedirle a Dios Padre el Don del Espíritu; valorar la familia, la amistad y la fraternidad; y aceptar la vida como donación y servicio.
" Y todo esto hasta llegar a madurar vuestro propio proyecto de vida, haciendo realidad el sueño de Dios para cada uno de vosotros, sabiendo que sea cual sea este sueño siempre será garantía de felicidad", añade el Rector Mayor de los Salesianos.
Don Ángel concluye con este deseo: "Mis queridos jóvenes: termino como inicié mi saludo, deseándoos una muy feliz fiesta de nuestro Amado Don Bosco. Que la Auxiliadora, Madre que lo ha hecho todo, siga siendo puerto seguro para vosotros y que el Señor Jesús siga conquistando vuestros corazones y vuestras vidas".
En recursos puede descargarse el mensaje completo:
“Rey Mago por un día” es el nombre de la campaña en la que han participado conjuntamente el...
Mis queridos jóvenes: dejaos conquistar por Jesús
IDENTIDAD DE LAS ESCUELAS SALESIANAS
MISIÓN
Las escuelas de la Inspectoría Salesiana María Auxiliadora tienen como misión ofrecer una educación integral de calidad, basada en los valores del Evangelio y el sistema educativo de Don Bosco, buscando la formación de todas las dimensiones de la persona para construir un nuevo modelo de sociedad. En este proceso educativo, la Comunidad Educativo-Pastoral propone a cada joven un modelo de crecimiento y desarrollo personal que está orientado al encuentro con Jesucristo y al descubrimiento del propio proyecto de vida, en el que encuentra el sentido a la misma y su incorporación a la sociedad y a la Iglesia. Esta oferta expresa el compromiso con la excelencia educativa, y una atención acogedora y personalizada de cada joven, con especial atención a los más desfavorecidos y necesitados, en unas escuelas abiertas, inclusivas y populares, comprometidas en la mejora continua y el desarrollo de su entorno. Nuestras escuelas potencian la coordinación y el trabajo conjunto entre ellas como partes imprescindibles de un proyecto que es mayor que cada una.
Mis queridos jóvenes: dejaos conquistar por Jesús
IDENTIDAD DE LAS ESCUELAS SALESIANAS
VISIÓN
Nuestras escuelas tienen un proyecto común que las impulsa a ser:
Escuelas que, fieles a su finalidad y misión, desarrollan, revisan, y actualizan permanentemente sus procesos educativos evangelizadores para dar una respuesta más adecuada a las distintas necesidades de sus destinatarios.
Escuelas en las que el desarrollo integral de las personas es el centro de toda su acción, orientada a la consecución de un modelo de persona concreto y al desarrollo de su proyecto de vida. Escuelas en las que los educadores se sienten parte del proyecto que desarrollan, y en las que se cuidan los procesos vinculados a su selección, acompañamiento y desarrollo continuo.
Escuelas que acogen a todos y vuelcan sus esfuerzos y recursos en aquellos que más lo necesitan, optando por la inclusividad.
Escuelas que evangelizan partiendo de la realidad de sus destinatarios.
Escuelas con un modelo de liderazgo bien definido, basado en la corresponsabilidad real, en las relaciones de confianza entre todos los que forman la Comunidad Educativo-Pastoral, y ejercido por personas formadas y acompañadas para ello.
Escuelas con un modelo de animación y gobierno definido bajo principios comunes, pero adaptado a las realidades y recursos de cada una de ellas.
Escuelas que se sienten parte de un proyecto común inspectorial y que son acompañadas desde la institución para encarnarlo en su realidad local.
Escuelas que refuerzan el trabajo en red entre ellas, aprovechando las riquezas de la realidad local, dotándose de metodologías y estructuras de trabajo que generen decisiones dialogadas y compartidas, la creación de un conocimiento común y el desarrollo de proyectos que las identifiquen.
Escuelas abiertas al entorno en el que se encuentran, y que impulsan el desarrollo del mismo mediante la apertura de las propias instalaciones, el servicio y la participación en instituciones e iniciativas locales.
Escuelas que se dotan de unos servicios de apoyo en distintos niveles (pedagógico, pastoral, administrativo, jurídico, económico…) que facilitan y mejoran su acción educativo-pastoral.
Escuelas que valoran la importancia y la participación de las familias dentro de la Comunidad Educativo-Pastoral e incentivan su participación en el desarrollo del Proyecto Educativo de cada una.
Escuelas que educan desde una visión integral de la persona, prestando atención al desarrollo de las competencias físicas, cognitivas, afectivas y espirituales, desde programas y metodologías activas.
Mis queridos jóvenes: dejaos conquistar por Jesús
IDENTIDAD DE LAS ESCUELAS SALESIANAS
VALORES
Nuestra escuela cree firmemente en los siguientes valores:
El Sistema Preventivo como modelo de educación y de relaciones dentro de la Comunidad Educativo-Pastoral.
La apuesta por la evangelización integrada en los procesos educativos con el fomento de itinerarios pastorales tomando como punto de partida el momento en el que está cada joven.
La continua actualización pedagógica pastoral, apostando por las metodologías activas y motivadoras que preparen a los alumnos para la vida.
La solidaridad y la sostenibilidad, con la promoción una educación para un mundo más justo ante todo tipo de pobrezas y discriminaciones.
La confianza incondicional en los jóvenes, protagonistas del proceso educativo-pastoral que la escuela les ofrece con múltiples propuestas educativas y pastorales.
La acogida de los alumnos y el acompañamiento en la búsqueda de sentido de su vida desde el modelo cristiano, con estilo salesiano, en un ambiente de relación próxima y familiar entre las personas.
La cultura del esfuerzo y del aprendizaje para la realización de las expectativas educativas y la consecución de la mejora permanente de la calidad de vida personal y social.
La participación y las relaciones basadas en la confianza, ejerciendo la corresponsabilidad e implicando a las personas en la toma de decisiones.
La opción y el compromiso por la formación profesional y el acompañamiento de los jóvenes en la inserción en el mundo del trabajo.