El film, financiado por la Federación Nacional delCNOS-FAP,narra la Formación Profesional en todos sus aspectos: las características de la filosofía educativa hoy, la tradición y los orígenes en Valdocco, el dinamismo en tantos países del mundo, la panorámica de la oferta formativa profesional… Una presentación institucional que permite utilizarlo en los centros educativos salesianos en cualquier ocasión: encuentros con los jóvenes, docentes, padres, empresas…
El documental discurre sobre dos aspectos:por una parte están los testimonios de los jóvenes y de los educadores, que acercan al espectador a la situación que se desarrolla; por otra parte se da lugar a la presentación de la realidad concreta formativa.La eficacia, la fuerza y la inmediatez de la filmación nos conducen a la rica realidad del mundo salesiano en los diversos continentes, a través de imágenes obtenidas en casi 60 países del mundo, desde 1994 hasta nuestros días.
Para todos los Salesianos y laicos del mundo que trabajan en la Formación Profesional quiere ser una presentación y un homenaje al final del Bicentenario del nacimiento de Don Bosco. Y también se le puede considerar como un subsidio muy válido, un punto de partida para la promoción en la Iglesia y en el territorio de la propuesta educativo-pastoral de los Salesianos. Este producto institucional tiene como objetivo implicar, informar, “emocionar”, atraer la atención de personas que deseen conocer mejor la presencia de los Salesianos en la Formación Profesional en el mundo.
Haciendo uso de las mismas palabras del Papa en la Basílica de María Auxiliadora el 21 de junio pasado: “Vosotros Salesianos tenéis el mismo desafío que ya tuvo Don Bosco. Acoger a estos chicos y chicas. ¿Y qué hacía Don Bosco? […] no decía grandes cosas, no; pequeñas escuelas para educarles en diversos oficios. Aquellas escuelas salesianas, que después se convertían en escuelas de “artes y oficios”, donde los chicos aprendían un oficio. […] En seis meses aprendían a hacer de electricistas o fontaneros, porque siempre hay un grifo que se estropea. Educación, pero educación a la medida de la crisis […] Démosles alguna cosa que sea fuente de trabajo, trabajos aunque sean pequeños – también hoy sí y mañana no. Una educación de emergencia, creo que necesitan esto los muchachos de la calle de hoy. Poco tiempo, pero un oficio práctico y ya veremos después. Que la creatividad salesiana tome en serio este desafío”.
