ESTUDIO DE LA PALABRA| CICLO C – XIV Domingo de tiempo Ordinario

27 junio 2022

Propuesta de Lectio Divina personal (o en grupo)

XIV Domingo de tiempo Ordinario Ciclo C (Lc 10-12.17-20)

 

 

ORACIÓN

Creemos que estás en medio de nosotros, Padre, y en nuestro interior;

creemos que el Espíritu de tu Hijo nos impulsa.

Te pedimos que no dejamos de estar abiertos al Espíritu,

y que sepamos escuchar sus insinuaciones.

Que venga sobre nosotros tu Espíritu

que nos ayude a conocer más a tu Hijo

a través de la Palabra que ahora escucharemos.

(B) PASOS PARA LA MEDITACIÓN

  1. LEE…

¿Qué dice el texto?

Atiende a todos los detalles posibles. Imagina la escena. Destaca todos los elementos que llaman la atención o te son muy significativos. Disfruta de la lectura atenta. Toma nota de todo lo que adviertas. Para la comprensión del texto te pueden servir los comentarios que te ofrecemos a continuación.

Texto (Lc 10-12.17-20)

Después de esto, el Señor designó a otros setenta y dos y los envió por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares que él pensaba visitar.  Y les dio estas instrucciones:

La mies es abundante, pero los obreros pocos. Rogad, pues, al dueño de la mies que envíe obreros a su mies. ¡En marcha! Yo os envío como corderos en medio de lobos. No llevéis bolsa, ni alforjas ni sandalias, ni saludéis a nadie por el camino. En la casa que entréis, decid primero: Paz a esta casa. Si hay allí gente de paz, vuestra paz recaerá sobre ellos; si no, se volverá a vosotros. Quedaos en esa casa comiendo y bebiendo de lo que tengan, porque el obrero tiene derecho a su salario. No andéis de casa en casa. Si al entrar en un pueblo, os reciben bien, comed lo que os sirvan. Curad a los enfermos que haya en él; y decidles: «Está llegando a vosotros el reino de Dios»: Pero si entráis en un pueblo y no os reciben bien, salid a la plaza y decid: «Hasta el polvo de vuestro pueblo que se nos ha pegado a los pies lo sacudimos y os lo dejamos. Sabed de todas formas que el reino de Dios está llegando». Os digo que el día del juicio será más tolerable para Sodoma que para ese pueblo.

Los setenta y dos volvieron llenos de alegría, diciendo: Señor hasta los demonios se nos someten en tu nombre.

Jesús les dijo: He visto a Satanás cayendo del cielo como un rayo. Os he dado el poder para pisotear a serpientes y escorpiones, y para dominar toda potencia enemiga, y nada os podrá dañar. Sin embargo, no os alegréis de que los espíritus se os sometan. Alegraos más bien de que vuestros nombres están escritos en el cielo.

Comentarios:

De nuevo, como en Lc 9, 1-6, Lucas nos habla de una misión de los discípulos. En este caso son más numerosos. Su número alude a Gn 10, según la versión griega del Antiguo Testamento, donde setenta y dos es el número de las naciones paganas. Si bien Lucas sabe que la misión universal no empezará hasta después de Pascua (Hch 1, 8), la presencia simbólica del número setenta y dos muestra su prefiguración en la vida de Jesús, aunque realizada por sus discípulos. El camino hacia Jerusalén se convierte en modelo para el camino de la iglesia futura. El hecho de enviar a sus discípulos de dos en dos es para que su testimonio tenga el valor jurídico que pedía la ley (Dt 1,7 6; 19 15).

Lucas ya había hablado de las exigencias de pobreza con las que debía ser llevada a cabo la misión (Lc 9, 3). El estilo de la evangelización es siempre el mismo para él. Sin embargo aquí añade tres rasgos que corresponden a los cambios que introduce en la vida humana la llegada del reino. Por una parte; no deban saludar a nadie en el camino (Lc 10, 4). La urgencia de la misión no permite detenerse en la complejidad de la cortesía oriental. Esta misma proximidad del reino aparece en Lc 10, 9. Es una cercanía que quizá tuviera su realización, en la predicación de Jesús, en el momento de la llegada a Jerusalén (Lc 9, 51). Se insiste también en la proximidad de la salvación definitiva a través de la idea de la mies. Anunciada por Juan el bautista (Lc 3, 16-17), en continuidad con la predicación profética del Antiguo Testamento (Is 33 11; 41 15-16; Jr 13 24; 51 2.33; Am 9 9; Jl 4 13); la época de la mies ha llegado con la predicación de Jesús. A esta tarea son asociados los discípulos de todos los tiempos. Pero la misión no será fácil. Entonces y ahora las dificultades surgen (Hch 20, 29; Jn 10, 12), si se quiere ser fiel a las exigencias del evangelio de Jesús.

Junto al envío de los setenta y dos, símbolo de la misión a los gentiles, Lc 10, 12-15 nos transmite unos contra las ciudades de Galilea que han rehusado reconocer los signos de Jesús. Contrastan estas palabras con los propósitos de Jesús sobre las ciudades de Samaría (Lc 9, 49-56). Pero no debemos ver en ellas una maldición, sino una simple constatación, expresada en un lenguaje oriental y solemne, del hecho del rechazo a Jesús por las ciudades de Galilea.

  1. MEDITA…

¿Qué me dice Dios a través del texto? Atiende a tu interior. A las mociones (movimientos) y emociones que sientes. ¿Algún aspecto te parece dirigido por Dios a tu persona, a tu situación, a alguna de tus dimensiones?

Sugerencias:

“El apóstol de la Buena Noticia no aparece acaparando honores, ni coleccionando puestos privilegiados,”.

“La misión evangelizadora adopta la pobreza, la sencillez y la cercanía con los pequeños como signo esencial.

  • ” Venga a nosotros tu Reino”
  • “Paz a esta casa”
  1. CONTEMPLA Y REZA…

¿Qué le dices a Dios gracias a este texto? ¿Qué te mueve a decirle? ¿Peticiones, alabanza, acción de gracias, perdón, ayuda, entusiasmo, compromiso? Habla con Dios…

Sugerencias:

Si me envías, Señor, dame compañeros de misión:

ellos y el Evangelio serán mis vienes y mi viático.

Hacer lo que tú me mandes será mi mayor gozo.

  1. ACTÚA…

¿A qué te compromete el texto? ¿Qué ha movido la oración en tu interior? ¿Qué enseñanza encuentras? ¿Cómo hacer efectiva esa enseñanza?

  1. COMPARTE…

Si la Lectio se hace en grupo, podéis compartir con sencillez lo que cada uno ha descubierto, para enriquecimiento del grupo.

  1. DA GRACIAS…

Puedes acabar este momento con una oración: expresa a Dios lo que has vivido, dale gracias por lo que te ha manifestado, y pide al Espíritu que te haga pasar de la Palabra a la vida.

Ven, Espíritu Santo,

ilumina mi corazón para que pueda entender la Palabra,

conocer más a Jesús

y hacer que en mi vida camine con criterios evangélicos.

Fuente y comentario Editorial CCS 2022

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

  1. DA GRACIAS…

Puedes acabar este momento con una oración: expresa a Dios lo que has vivido, dale gracias por lo que te ha manifestado, y pide al Espíritu que te haga pasar de la Palabra a la vida.

 

 

Ven, Espíritu Santo,

ilumina mi corazón para que pueda entender la Palabra,

conocer más a Jesús

y hacer que en mi vida camine con criterios evangélicos.

 

 

Fuente Oración: Evangelio al dia 2022 Ed. CCS

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