ESTUDIO DE LA PALABRA| CICLO C – VII DOMINGO DE TIEMPO ORDINARIO

14 febrero 2022

Propuesta de Lectio Divina personal (o en grupo)

VII DOMINGO DE TIEMPO ORDINARIO Ciclo C (LC 6,27-38)

 

 

ORACIÓN

Creemos que estás en medio de nosotros, Padre, y en nuestro interior;

creemos que el Espíritu de tu Hijo nos impulsa.

Te pedimos que no dejamos de estar abiertos al Espíritu,

y que sepamos escuchar sus insinuaciones.

Que venga sobre nosotros tu Espíritu

que nos ayude a conocer más a tu Hijo

a través de la Palabra que ahora escucharemos.

(B) PASOS PARA LA MEDITACIÓN

  1. LEE…

¿Qué dice el texto?

Atiende a todos los detalles posibles. Imagina la escena. Destaca todos los elementos que llaman la atención o te son muy significativos. Disfruta de la lectura atenta. Toma nota de todo lo que adviertas. Para la comprensión del texto te pueden servir los comentarios que te ofrecemos a continuación.

Text (LC 6,27-38)

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «A los que me escucháis os digo: Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, orad por los que os injurian. Al que te pegue en una mejilla, preséntale la otra; al que te quite la capa, déjale también la túnica. A quien te pide, dale; al que se lleve lo tuyo, no se lo reclames. Tratad a los demás como queréis que ellos os traten. Pues, si amáis sólo a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores aman a los que los aman. Y si hacéis bien sólo a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores lo hacen. Y si prestáis sólo cuando esperáis cobrar, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a otros pecadores, con intención de cobrárselo. ¡No! Amad a vuestros enemigos, haced el bien y prestad sin esperar nada; tendréis un gran premio y seréis hijos del Altísimo, que es bueno con los malvados y desagradecidos. Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida que uséis, la usarán con vosotros.»

Comentarios:

El texto tiene dos elementos muy destacados: a) en primer lugar, la gran cantidad de pronombres personales de segunda persona (sobre todo de plural); esto imprime un fuerte carácter de apóstrofe (una interpelación vehemente dirigida en segunda persona!) a este evangelio. No quiere pasar inadvertido al oyente de ninguna manera, sino que busca interpelar fuertemente y lograr una conmoción que nos “remueva” por dentro. ¿Lo hace? ’

 Igualmente, hay una gran cantidad de imperativos (hasta 17 en el original), por lo que a la interpelación se suma un potente alcance ético. Un texto, pues, que quiere llegar a nuestro comportamiento y elevarlo. ¿Le dejamos? ’

 Es interesante la disposición textual: la parte central (vv. 32-34) propone con lógica que una ética “mediocre” nos iguala por abajo a “los pecadores”. Y las partes extremas, que nos elevan a una ética mucho más exigente y alternativa tienen sus respectivos fundamentos: la primera, en la autoridad ejemplar del que habla (“Yo os digo”): Jesús, maestro que enseña lo que él mismo vive; la segunda, en la experiencia de Dios, que es Padre y es misericordioso. Ser discípulos de Jesús y ser hijos de un Dios así conducen necesariamente a unas opciones éticas inauditas. ’ Para muchos, el amor a los enemigos fue la gran novedad de la ética cristiana. Pero el amor a los enemigos (y todas las demás disposiciones del texto que “desarrollan” ese primer precepto del amor) no es tanto una norma general de conducta, cuanto una actitud característica de los discípulos de Jesús que experimentan el amor paterno de Dios. No es condición sino resultado. Lo primero y decisivo es experimentar el amor de Dios y mantenernos fieles en el seguimiento de Jesús. Solo así podremos crecer en la ética “cristiana”. ¿Qué experiencia de Dios y de discipulado refleja nuestro comportamiento ético?

  1. MEDITA…

¿Qué me dice Dios a través del texto? Atiende a tu interior. A las mociones (movimientos) y emociones que sientes. ¿Algún aspecto te parece dirigido por Dios a tu persona, a tu situación, a alguna de tus dimensiones.

Sugerencias:

           * El verdadero amor implica un alma noble donde habite la verdadera misericordia

          *  Y tratad a los hombres como queréis que ellos os traten

  • ” ¡Amar a los enemigos!”
  • “Dios me quiere”
  1. CONTEMPLA Y REZA…

¿Qué le dices a Dios gracias a este texto? ¿Qué te mueve a decirle? ¿Peticiones, alabanza, acción de gracias, perdón, ayuda, entusiasmo, compromiso? Habla con Dios

Sugerencias:

Señor, haz de mi un instrumento de tu paz

Allí donde haya odio, ponga yo amor;

Donde haya ofensa, ponga yo perdón;

Donde haya discordia, ponga yo unión;

Donde haya error, ponga yo verdad;

Donde haya tinieblas, ponga yo luz;

Donde haya tristeza, ponga yo alegría.

  1. ACTÚA…

¿A qué te compromete el texto? ¿Qué ha movido la oración en tu interior? ¿Qué enseñanza encuentras? ¿Cómo hacer efectiva esa enseñanza?

  1. COMPARTE…

Si la Lectio se hace en grupo, podéis compartir con sencillez lo que cada uno ha descubierto, para enriquecimiento del grupo.

  1. DA GRACIAS…

Puedes acabar este momento con una oración: expresa a Dios lo que has vivido, dale gracias por lo que te ha manifestado, y pide al Espíritu que te haga pasar de la Palabra a la vida.

Ven, Espíritu Santo,

ilumina mi corazón para que pueda entender la Palabra,

conocer más a Jesús

y hacer que en mi vida camine con criterios evangélicos.

 

Fuente Oración: Evangelio al dia 2021 Ed. CCS

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