La gran emoción experimentada por la visita del Papa a la Basílica de María Auxiliadora y sobre todo por su actitud de cercanía con la Familia Salesiana no han dejado indiferente al Rector Mayor, que ha decidido compartir sus reflexiones en Facebook sobre este encuentro. "No puedo dejar que pase como si nada hubiera acontecido. Deseo contaros algo de lo que vivimos".
"Mis buenos amigos y amigas: hemos vivido en Valdocco una jornada histórica, con la visita del Papa a la Basílica de María Auxiliadora en Turín", comenzó el Rector Mayor. Don A. F. Artime luego recalcó lo emocionado que estaba por la atención personal reservada por el Papa a todos los presentes en la Basílica: "Entró en la Basílica y fue saludando uno a uno a quienes le tendían sus manos. Para mí era admirable, y toda una enseñanza, cómo se detenía a conversar con cada Salesiano, Hija de María Auxiliadora, u otro miembro de la Familia Salesiana que le decía algo. Se detenía, escuchaba y respondía ¡Y la Basílica estaba repleta, lo cual permitía calcular el tiempo necesario…! No le importaba".
Lo más conmovedor fue “el saludo personal del Papa a cada Salesiano e Hija de María Auxiliadora que estaba en silla de ruedas. Les confieso que me conmoví profundamente ante la ternura de esas escenas. Eran las escenas de tantas vidas dadas, entregadas plenamente, y que ahora se viven en la enfermedad o en la limitación, pero, a fin de cuentas, vidas llenas de plenitud y sentido. Y frente a ellas, frente a ellos, la mirada llena de ternura de un Pastor que sabía captar tanta donación”.
Luego, de la oración silenciosa ante la urna de Don Bosco ("un hermoso gesto, lleno de significado y simbolismo") y el saludo de Don A. F. Artime en nombre de toda la Familia Salesiana, y la posterior intervención del Papa donde se dirigió de modo espontáneo expresando su deseo de crear un clima de comunión con todos los presentes. Recuerda el Rector Mayor: "le entregaron el mensaje oficial, lo miró durante diez segundos, pensó, e inmediatamente dijo:" Demasiado formal de … ‘(…) y comenzó a hablar de manera personal, espontánea, habló con el corazón y a los corazones".
Nos cautivó. Estuvo más de media hora hablándonos y realmente en el sentimiento y con la mirada estábamos abrazando al Papa. Hermanos, hermanas, amigos y amigas muy queridos: fue una preciosa visita con un fuerte significado y trascendencia, pero fue mucho más que esto. Fue encuentro con el Pastor que manifiesta con su hacer eso que él ha calificado como “tener olor a oveja”. Resume Don A. F. Artime.
Analizando a posteriori la visita del Papa, el Rector Mayor concluye que se trata de “… mediación para nosotros del Señor Jesús y de Don Bosco que nos quiere Familia Salesiana muy viva en la Iglesia y más entregada que nunca a los jóvenes y, entre ellos, a los más pobres, a quienes más nos necesitan”.
Para recordar esos momentos, en el sitio sdb.org está disponible el texto del discurso pronunciado por el Papa de manera personal.
