En pleno proceso de actualización pedagógica y pastoral, y en sintonía con el objetivo inspectorial propuesto para este curso, la casa salesiana de Las Palmas no ha querido perder la oportunidad de ofrecer unas jornadas formativas sobre la experiencia del Oratorio de inspiración claretiana, como tiempo de oración con la Palabra de Dios en el centro. El mismo título dado a las Jornadas («Encuéntrate con Él») ha querido ser un botón de muestra de una realidad que es posible –y necesaria hoy más que nunca– en cualquier ambiente educativo-pastoral salesiano: el encuentro con el Señor resucitado a través de sus presencias: su Palabra, la eucaristía, el grupo de los creyentes.
En efecto, los días 4 y 5 de noviembre, Fran Urrutia, misionero claretiano del colegio Arkartza-Claret, de Bilbao, ha compartido con diversos grupos de Salesianos-Las Palmas la experiencia de oración que la provincia de Euskal Herria lleva animando desde el año 2001. A una mañana –la del viernes– plagada de sesiones de oración con los niños y profesores de Educación Infantil y Primaria, sucedió una tarde en la que los jóvenes de los grupos Vida 1 y Vida 2, con sus animadores, pudieron vivir la misma experiencia, adaptada a su nivel y edad. Al final de la tarde todos los participantes pudieron compartir con el ponente una reunión formativa sobre el modelo propuesto.
Estas Jornadas no han querido estar cerradas en exclusiva a la casa salesiana grancanaria. A tal efecto, en la mañana del sábado las Jornadas se abrieron a otros centros católicos, con una significativa participación. Formación, celebración de la Palabra y un tiempo de feedback entre los participantes y el ponente completaron una mañana de intenso trabajo.
Queda ahora que la experiencia no caiga en saco roto, y sea asumida como opción preferencial por la casa salesiana. Desde la experiencia compartida estos días, está claro que es preciso educar a niños, adolescentes y jóvenes en el trato cercano con Dios, si queremos garantizar nuestra identidad como centros educativos católicos: «Aquellos que han recibido en la infancia una iniciación a la apertura hacia el Misterio y a la oración se encuentran más capacitados para desarrollar la competencia espiritual que aquellos que no han sido iniciados», en palabras del ponente, Fran Urrutia. Su experiencia por más de quince años en la animación del Oratorio y la opción de todos los colegios de aquella provincia claretiana son, por sí solas, garantía de éxito de esta experiencia pastoral, ciertamente novedosa aún en casi todas las casas salesianas.
