El día 20 de noviembre en la bella localidad sevillana de Utrera, la Federación Regional de Antiguos Alumnos y Antiguas alumnas de Don Bosco de la Zona Sur, dio por concluidos los momentos celebrativos programados en torno a la efeméride del 150 aniversario del nacimiento del movimiento de los Antiguos Alumnos.

El acto de clausura fue verdadero broche de oro de una bien celebrada conmemoración, que se inició hace dos años con el concurso del logotipo, al que le siguió la campaña de camisetas y su video promocional, la muy interesante campaña de comunicación de Consiliarios y Presidentes Regionales, para finalmente, a pesar de todo lo acontecido en los últimos tiempos, celebrar dignamente con este acto de clausura, un hecho tan relevante para la historia de los antiguos alumnos.
Al igual que en los esponsales de Caná, reservamos lo mejor para el final. Desde la Ejecutiva Federal siempre se pretendió que el acto condensara espiritualidad, recuerdo, agradecimiento, alegría y fiesta. No era empresa fácil.
Con puntualidad, a las 11 de la mañana, se inició la Eucaristía presidida por el Vicario Episcopal Don Diego Pérez Ojeda, fue concelebrada por un buen número de salesianos, entre los que cabe destacar a Don Joan Lluis Playá, Delegado Mundial para la Familia Salesiana que impartió a los presentes una emotiva homilía de profundo sabor salesiano.

A continuación tuvo lugar el acto de clausura. Se quiso homenajear la figura de los presidentes locales vivos de cada una de las asociaciones que conforman nuestra Federación. Se presentó un video de cada asociación y posteriormente se iba convocando a los presidentes al estrado donde se les entregaba un recordatorio. Era un gesto de agradecimiento y sincero reconocimiento, no sólo a los presidentes, sino a todas sus juntas, en definitiva, a todos los asociados que han hecho grande la existencia de nuestra federación regional durante estos años de vida. La presentación de los vídeos asociativos y la llamada a los presidentes se hizo por bloques territoriales que fueron perfectamente ensamblados por un recordatorio histórico de nuestro movimiento desde sus orígenes hasta sus primeros años de vida. Desfilaron por el estrado utrerano, personajes vitales en nuestra existencia: Gastini, Reviglio, Don Rua, Don Rinaldi y por supuesto Don Bosco. De todos ellos somos tributarios por lo mucho que nos guiaron y protegieron.

Fue un día grande para una fecha grande. Es destacable la puesta en escena, la minuciosidad y profesionalidad de los medios técnicos utilizados que permitieron dar al evento la categoría que merecía. Las palabras del Rector Mayor que también, mediante vídeo, quiso sumarse a nuestra fiesta. No hay palabras suficientes de agradecimiento a la Casa y Comunidad de Utrera por su acogida y entrega. Tuvimos la dicha de dar la bienvenida a la recién constituida Asociación de Utrera, que recibió el apoyo y estímulo de las 20 asociaciones presentes, incluida una representación canaria, y de los casi 200 antiguos alumnos que allí nos congregamos. También es de agradecer la asistencia de miembros de la familia salesiana que compartieron esta fiesta como uno más de nosotros, hacemos extensivo el agradecimiento a las autoridades civiles que asistieron haciendo entre todos una jornada completa.

Los antiguos alumnos en el acto de clausura nos contagiamos del espíritu de aquellos salesianos pioneros que difundieron el carisma salesiano desde Utrera a toda España. La penetrante mirada del Don Bosco que preside la Basílica utrerana nos cuidó en todo momento y la Virgen Auxiliadora nos regaló un día histórico en todos los sentidos.