[et_pb_section fb_built=\u00bb1″ _builder_version=\u00bb4.9.3″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb][et_pb_row _builder_version=\u00bb4.9.3″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb][et_pb_column type=\u00bb4_4″ _builder_version=\u00bb4.9.3″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb][et_pb_tabs active_tab_background_color=\u00bb#FFFFFF\u00bb inactive_tab_background_color=\u00bb#DC001B\u00bb active_tab_text_color=\u00bb#DC001B\u00bb _builder_version=\u00bb4.9.4″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb border_radii=\u00bbon|20px|20px|20px|20px\u00bb box_shadow_style=\u00bbpreset1″][et_pb_tab title=\u00bbLeo la Palabra\u00bb _builder_version=\u00bb4.9.4″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb tab_text_color=\u00bb#FFFFFF\u00bb tab_font_size=\u00bb16px\u00bb]<\/p>\n
MC 4,26-34<\/span><\/p>\n En aquel tiempo, Jes\u00fas dec\u00eda al gent\u00edo: \u00abEl reino de dios se parece a un hombre que echa semilla en la tierra. \u00c9l duerme de noche y se levanta de ma\u00f1ana; la semilla germina y va creciendo, sin que \u00e9l sepa c\u00f3mo. La tierra va produciendo fruto sola: primero los tallos, luego la espiga, despu\u00e9s el grano. Cuando el grano est\u00e1 a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega\u00bb. Dijo tambi\u00e9n: \u00ab\u00bfCon qu\u00e9 podemos comparar el reino de Dios? \u00bfQu\u00e9 par\u00e1bola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla m\u00e1s peque\u00f1a, pero despu\u00e9s de sembrada crece, se hace m\u00e1s alta que las dem\u00e1s hortalizas y echa ramas tan grandes que los p\u00e1jaros del cielo pueden anidar a su sombra\u00bb. Con muchas par\u00e1bolas parecidas les expon\u00eda la palabra, acomod\u00e1ndose a su entender. Todo se lo expon\u00eda con par\u00e1bolas, pero a sus disc\u00edpulos se lo explicaba todo en privado.<\/p>\n [\/et_pb_tab][et_pb_tab title=\u00bbMedito la Palabra\u00bb _builder_version=\u00bb4.9.4″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb tab_text_color=\u00bb#FFFFFF\u00bb tab_font_size=\u00bb16px\u00bb]<\/p>\n Con la persona de Jes\u00fas se pone de manifiesto c\u00f3mo Dios act\u00faa en nosotros y en el mundo. Jes\u00fas, como hace el sembrador, echa la semilla en la tierra, esparce por todas partes su palabra y llena de emoci\u00f3n a la gente con sus signos: los gestos de bondad sobre todo hacia los pobres. Y no se cansa de hacerlo: el evangelio lo presenta como un hombre activo rodeado de gente, interesado por su vida, siempre interpelador.<\/p>\n A pesar de que cuesta ver los cambios, entender el crecimiento, valorar las cosas peque\u00f1as… \u00e9l es un hombre que ense\u00f1a a vivir en la esperanza, a entender que no todo depende de nuestras fuerzas, sino que hay un crecimiento sin intervenci\u00f3n humana, pero que hay que esperarlo con paciencia activa.<\/p>\n En la primera par\u00e1bola Jes\u00fas quiere mostrar el contraste entre la espera paciente, d\u00eda y noche, un d\u00eda y otro, del campesino y el crecimiento inesperado e irresistible de la semilla. Un crecimiento que supera todas las expectativas. Mientras el sembrador duerme, la semilla, por la fuerza que tiene en su interior, va creciendo \u201cella sola\u201d, sin que el campesino \u201csepa c\u00f3mo\u201d.<\/p>\n \u00bfDe qu\u00e9 me est\u00e1 hablando el evangelio? \u00bfDe eficacia por el esfuerzo humano o m\u00e1s bien de fecundidad gratuita? Tal como pasa con la semilla sembrada, as\u00ed es el crecimiento en tantas realidades humanas y mundanas. Tendr\u00edamos que ser m\u00e1s perspicaces parar darnos cuenta de realidades que crecen desproporcionadamente respecto a nuestro esfuerzo, que son muy fecundas, a pesar de que nos parecen poco eficaces. Hay realidades que nos parece que no evolucionan, que est\u00e1n estancadas, \u201centerradas\u201d en la tierra, que nos hacen venir ganas de abandonar, de no insistir, de dedicarnos a una cosa que sea m\u00e1s productiva. Nos cansamos de esperar, nos cansamos de regar un palo seco, nos cansamos de las peque\u00f1eces…, queremos n\u00fameros, resultados, cantidades que justifiquen nuestro trabajo.<\/p>\n Pues bien, Jes\u00fas nos pide tener una actitud contemplativa, no menospreciar las cosas peque\u00f1as, confiar en la fuerza interior que Dios ha puesto en nosotros, en las personas, en las realidades humanas.<\/p>\n \u00a1Dej\u00e9monos sorprender por la novedad que cada d\u00eda nos ofrece la vida!<\/span><\/p>\n [\/et_pb_tab][et_pb_tab title=\u00bbRezo con la Palabra\u00bb _builder_version=\u00bb4.9.4″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb tab_text_color=\u00bb#FFFFFF\u00bb tab_font_size=\u00bb16px\u00bb]<\/p>\n Salmo 91 en forma de Oraci\u00f3n<\/strong><\/p>\n Gracias Se\u00f1or porque en tu palabra me aseguras que qui\u00e9n habita a tu abrigo ser\u00e1 acogido en tu sombra.<\/p>\n Hoy te digo Se\u00f1or: \u00abT\u00fa eres mi refugio, mi fortaleza, el Dios en quien conf\u00edo.\u00bb<\/p>\n S\u00f3lo t\u00fa puedes librarme de las trampas del cazador y de las mort\u00edferas plagas, pues me cubrir\u00e1s con tus plumas y bajo tus alas hallar\u00e9 refugio. \u00a1Tu verdad ser\u00e1 mi escudo y mi baluarte!\u2028No temer\u00e9 el terror de la noche, ni la flecha que vuele de d\u00eda, ni la peste que acecha en las sombras ni la plaga que destruye a mediod\u00eda.<\/p>\n Podr\u00e1n caer mil a mi izquierda, y diez mil a mi derecha, pero a m\u00ed no me afectar\u00e1.\u2028No tendr\u00e9 m\u00e1s que abrir bien los ojos, para ver a los incr\u00e9dulos recibir su merecido.<\/p>\n Te he puesto a ti Se\u00f1or como mi refugio, a ti mi Dios como mi protecci\u00f3n, ning\u00fan mal habr\u00e1 de sobrevenirme, ninguna calamidad llegar\u00e1 a mi hogar.\u2028Porque t\u00fa ordenar\u00e1s que sus \u00e1ngeles me cuiden en todos mis caminos.\u2028Con sus propias manos me levantar\u00e1n para que no tropezar con piedra alguna.\u2028Aplastar\u00e9 al le\u00f3n y a la v\u00edbora; \u00a1hollar\u00e9 fieras y serpientes!<\/p>\n \u00abT\u00fa Se\u00f1or me librar\u00e1s, porque me has unido a ti; Me proteger\u00e1s, porque he reconocido tu nombre.\u2028Te invocar\u00e9 Se\u00f1or, y me responder\u00e1s; T\u00fa el eterno estar\u00e1s conmigo en momentos de angustia y me has prometido que me librar\u00e1s y me llenar\u00e1s de honores.\u2028Me colmar\u00e1s con muchos a\u00f1os de vida y me har\u00e1 gozar de mi salvaci\u00f3n.\u00bb<\/p>\n Lo creo con todo mi coraz\u00f3n: Am\u00e9n.<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n [\/et_pb_tab][et_pb_tab title=\u00bbOtras Palabras me ayudan\u00bb _builder_version=\u00bb4.9.4″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb tab_text_color=\u00bb#FFFFFF\u00bb tab_font_size=\u00bb16px\u00bb]<\/p>\n Como el grano de mostaza<\/strong><\/p>\n Un buen d\u00eda un joven se presenta en el despacho para apuntarse a un curso. Hago la acogida. Durante 20 minutos escucho su vida: miserias y alegr\u00edas, dificultades y avances. Material suficiente para hacer un libro. Le informo. Se va, dici\u00e9ndome que se lo pensar\u00e1.<\/p>\n Unos d\u00edas despu\u00e9s me llama. Su voz tiembla un poco cuando acepta la plaza. En la segunda acogida percibo su ilusi\u00f3n. Yo estoy contenta, pero no me manifiesto (\u00bfpor qu\u00e9 no manifiesto mi alegr\u00eda?).<\/p>\n Y comienza el curso. Un joven m\u00e1s procedente… \u00bfdel fracaso?, \u00bfde un proceso migratorio?, \u00bfde la calle?, \u00bfde la soledad de su casa?; \u00a1de todo a la vez! Un joven m\u00e1s con nosotros. Y sonr\u00edo. Y mi coraz\u00f3n comienza nuevamente a trabajar por aquel joven. S\u00ed, s\u00ed, con el coraz\u00f3n y con la cabeza poniendo a su alcance: los recursos, el equipo, los compa\u00f1eros, el temario, las herramientas… Pero noto que ha comenzado tambi\u00e9n en m\u00ed una nueva aventura: ser y estar al lado de este joven.<\/p>\n Y as\u00ed van pasando horas, d\u00edas, semanas compartidas. Y el joven se va abriendo. Las distancias se acortan. \u00bfTengo que mantener la distancia a que el cargo me obliga o en un momento distendido, en una ocasi\u00f3n puntual… puedo ser yo misma? El coraz\u00f3n me dice que me tendr\u00eda que mostrar m\u00e1s como soy yo.<\/p>\n En el compartir, casi tocando, es como yo me doy cuenta del grano de mostaza que este joven ha sembrado en mi interior. S\u00ed, \u00a1es \u00e9l quien ha sembrado! \u00bfPor qu\u00e9 tenemos que ser siempre nosotros los sembradores? Este joven -como tantos otros- ha encendido una chispa dentro de m\u00ed, que me motiva para trabajar con una mejor calidad, con m\u00e1s cuidado y con m\u00e1s amor. Ya no quiero renunciar a sentir lo que cada joven me aporta; no quiero renunciar a dejarme afectar por este nuevo aliento que tantos j\u00f3venes depositan en m\u00ed… Aliento que significa vida, renovaci\u00f3n, trabajo, mejora…<\/p>\n Gracias, joven… Gracias por ense\u00f1arme a fijarme en el d\u00eda a d\u00eda… y en todo lo que tantos j\u00f3venes han depositado en mi interior.<\/p>\n